Los premios G(P)oya

A pesar de que esta semana había alguna peli en cartelera que nos apetecía ver, al final sólo fuimos a ver Juno. Así que a mí me toca cubrir los premios del cine Español, los fálicos Goya.
Este año, siendo consecuentes, no hemos visto muchas películas españolas. Pero nos podemos escudar en las grandes decepciones que nos ha ido trayendo últimamente (y no tan últimamente). De todas maneras hay un par de películas que no vi en su momento y que están en la bandeja de "por ver", son Siete mesas de billar francés y Bajo las estrellas. Las dos películas que se han llevado el premio a la mejor actriz y actor respectivamente. Maribel Verdú lleva bastante tiempo mereciendose un reconocimiento. En cuanto a la ganadora, me repetiría diciendo que es una sorpresa, a mi de hecho me pareció una sorpresa su nominación. Una película nada usual, que espero que llegue al gran público en el reestreno tras el premio. Su gran virtud es la naturalidad de las situaciones que presenta, que te hace sentir como un mirón espiando en las vidas de tus vecinos. Un defecto que le achaco, y no es propio de la película, es que tras su éxito se haga un género de ella, una especie de naturalismo cinematográfico que, en mi opinión, no aportaría demasiado. De todas maneras me llevé una gran alegría al ver que una idea (bien desarrollada) había vencido a un gran presupuesto. Tampoco quiero quitarle méritos al Orfanato, pero me pareció un tema trillado y que utiliza los recursos de siempre (que ya son más propios Scary Movie). En resumen, quizá este año no haya sido tan malo para el cine español como se ha pintado (y me incluyo).